FOUCAULT fue certero:
“No creo en absoluto que nuestra sociedad sea democrática. Si uno entiende por democracia el efectivo ejercicio del poder por una población en la que nadie esté dividido u ordenado jerárquicamente en clases, es absolutamente claro que estamos muy lejos de la democracia. Es también claro que vivimos bajo un régimen de dictadura de clases, un poder de clases que se impone a sí mismo mediante la violencia, siempre cuando los instrumentos de esa violencia son institucionales y constitucionales. Y esto ocurre en un grado que impide que exista una verdadera democracia”.

Marcas israelíes-estadounidenses en Gaza, agravadas por el silencio cómplice de otros gobiernos







Esto es producto de los gobiernos israelí y norteamericano. Que nos disculpen por la crudeza, pero no podemos hacernos los desentendidos ante tamaños crímenes, acentuados con el silencio o la tibieza cómplice de gobiernos como el chileno.